Protegen las heridas de los niños frente a la suciedad y las bacterias, al tiempo que cubren toda la herida. El material es tolerable por la piel y los colores son seguros para niños. La compresa central no se adhiere a la herida, la protege y la cuida. Su fuerte adherencia asegura que el apósito permanezca en su sitio y que, sin embargo, su retirada sea indolora.
- Fácil de retirar y tolerable por la piel
- Colores seguros para niños
- 20 diseños diferentes